Capítulo XXXIX ~ Definitivamente odio a los grifos

Ibally volaba a nuestro alrededor haciendo de piruetas de vez en cuando. Llevábamos 1 día volando, nosotras nos pasábamos la mayoría del tiempo hablando, los chicos.....no tanto.
Garried intentaba impresionar a Ibally mostrándose fuerte o cosas por el estilo, pero en vano ya que se había caído por lo menos 3 veces y era Ibally quien tenía que salvar a su amante en apuros.
Al contrario, Fred se dedicaba a mirar al orizonte y gritar de vez en cuando cosas estúpidas como "Cuidado con la gaviota!" o "Todo a estribor!" (De lo que nosotras, las chicas, las únicas cuerdas, nos burlábamos todo el tiempo).
Todo iba tranquilo, por ahora no nos había atacado ningún monstruo. Los pegasos no iban muy rápido, la verdad, pero era divertido.
Entonces llegó la manada.
3 grifos enormes graznaron desde lejos. Todos nos pusimos alerta. Ibally (la única valiente) se acercó con velocidad camuflándose con las nubes para ver mejor a los bichos. Pocos segundos después los vimos.
Grifos de 2 metros de largo por lo menos, alas enormes, un pico amarillento  que me arrancaría la cara de un bocado, unas garras....dios, que asco de garras. Por lo menos tenían el tamaño de mi cara, eran negras con mugre y sangre reseca.Me dieron tanto miedo que casi me caigo del pegaso solo con verlos. 



Estaba abstraída en mis pensamientos, cuando una voz de alarma resonó, advirtiendo de peligro. Alce la vista y vi no muy lejos varios grifos, de gran tamaño, que se acercaban hacia nosotros a considerable velocidad. Pude ver los gestos de mis compañeros, desde estar encorvado y d repente, como si nada, ponerse recto y agarrar bien la crin del pegaso, hasta casi caerse del lomo o girar la cabeza y mirar para advertir al resto, con una pizca de miedo, miedo a lo que podía pasar. 

Estaban cada vez a menos distancia, donde se les podía observar mejor. Garras negras, asquerosas y con sangre reseca, al igual que el pico, afilado y amarillento. Estaban a 10 metros, 9 metros, 8 metros, 7 metros... Hasta que estaban justo encima de nosotros pude observar, claramente, una cabeza, oscura, con rostro, y sangrante. No pude evitar sobresaltarme, inconscientemente, sabía que conocía la persona. Cerré los ojos fuertemente y volví a abrirlos, no había nada, pero estaban sobre nosotros. Instintivamente, me puse los brazos sobre la cabeza para protegerme y me pegue lo mas posible al pegaso. evitando así que estas garras me diesen en algún instante, aun que eso no evito que me llevase un buen arañazo en el hombro. 

-Jalia!!!-grité al verla con los ojos muy abiertos observando uno de los grifos
Ella reaccionó, se agachó pero el grifo le arañó el hombro con fuerza justo antes de que Fred lo atravesara con su arco.
Después de que Tania se cargara uno con un arcoirís (se que suena irónico) solo quedaba uno. Claramente, todos nos lanzamos hasta el bicho pero antes de que pestañeáramos el grifo había tirado a Fred del pegaso y lo vimos caer en picado hacia el mar con tres arañazos en el hombro (con la forma de las garrras del grifo).
-No!!!!-gritamos mientras Ibally le mandaba una ráfaga de viento al grifo que salió disparado hasta que lo perdimos de vista.
-Fred....-dijo Garried con un hilo de voz.
Vimos a Ibally descender en picado hacia el cuerpo inmóvil de Fred y volver con la cabeza baja y llorando. Todos bajamos la cabeza
-Demasiado tarde...lo siento chicos...
Me vinieron las lágrimas a los ojos, vi a Alex, Garried y Ibally llorar a mi lado.
Bajamos a la orilla con la espada de Fred (que había dejado en el pegaso antes de caer).
-Te recordaremos siempre, Fred- dijo Alex 
Acto seguido, dejó caer la espada en el agua y se la llevó la corriente
Lloramos un rato y volvimos a los pegasos desanimados.
-Fue...muy valiente-dije
-Si- afirmaron todos mientras despegábamos.
-Al menos no va a morir nadie más- dijo Tania
Todos la fulminamos con la mirada
Os juro que estaba a punto de estrangular a la chica, si no la hubiera visto hablar con John Breiker por mensaje iris y sonrojarse (osea, de descubrir que tiene corazón y puede amar) la habría tirado del pegaso.

-Bueno, Nié, eres la nueva jefa de la misión- dijo Jalia muy convencida
-Que soy que!?
-Si, se supone que en Alemania serás nuestra guía así que ahora mismo tienes el mayor cargo.- afirmó Garried

Habíamos perdido a uno de nuestros mejores hombres por un grifo  y yo era la nueva jefa ¿Que nos iba a pasar ahora?

Besukis :3, Piper McLean

PD: La parte rosa (menos esto último) lo hizo Clarisse :3

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